En algunas ocasiones nos enfrentamos a un despido y no sabemos muy bien cómo actuar, ni entendemos bien el procedimiento. Por ello, en el post de hoy, te dejamos una pequeña guía para hacerte más sencillo este proceso:
Preaviso al trabajador: El preaviso es un requisito obligatorio sólo para los despidos por causas objetivas. Sin embargo, cuando el despido es disciplinario, es decir que has incurrido en un incumplimiento grave y culpable en el desempeño de tu trabajo, el preaviso no es obligatorio. Si no te avisan el despido no es improcedente, pero el empresario está obligado a pagarte los días que haya incumplido en el aviso.
Firma de la carta de despido: La firma de la carta simplemente significa que la has recibido. Lo mejor es poner al lado de la firma “no conforme”, de esta manera luego podrás leerla con detenimiento o hacer consultas legales. En la carta vendrá indicada la propuesta de finiquito, la causa o hechos que motivan el despido y la fecha en la que tendrá efecto el despido. Si un despido es transmitido de forma verbal, no será valido y será improcedente.
¿Qué incluye el finiquito? Los salarios que te queden por cobrar, la parte proporcional de las pagas extras y las vacaciones a las que tengas derecho y no hayas disfrutado antes de la extinción contractual.